carta de un artista a otro.

(escrita por Blas Castagna a propósito de la muestra de Andrés Waissman en el Borges)

Querido Andrés, Me gustó mucho tu muestra. Creo absolutamente que sería un lujo para cualquier País Central. Pero aquí estamos. Tal como muchas veces me siento, perdidos en un rinconcito al sur del Coño Sur. Pero, paradójicamente suceden muestras como la tuya, donde lo meramente plástico está excedido -como en la Obra Negra de Goya- por una visión filosófica, también antropológica de los tiempos que le toca vivir en su contemporaneidad a un gran artista. Y vos lo sabés muy bien, toda Obra verdaderamente revolucionaria no es aceptada masivamente y muchas veces le toca recibir el escarnio de los enanos. La Historia del Arte repite constantemente -por eso es Historia del Arte- la incomprensión, hasta la crítica más sorda de toda obra o movimiento que fue avanzada o profunda reflexión de su Tiempo. Yo ya le he dicho a unos cuantos: "Waissman desde hace ya mucho tiempo es dueño de un espléndido oficio y de una grande poesía mostrada en innumerables obras. Sin embargo no se apoltronó como muchos y decidió despojarse de lo exitoso y ya muy aceptado, para que con mucha libertad y con mucho valor intentar generosamente lo nuevo..." Bueno, querido amigo mío, solo quiero decirte, GRACIAS porque tu Obra y también tu Vida es una gran lección que -como siempre ha sucedido- sólo unos pocos podrán valorar adecuadamente. Tu muestra es sin duda un hito, una Señal. Tu amistad me da alegría y me enorgullece. En nombre de Dina y en el mío propio Te felicitamos muy sinceramente y te damos nuestro mejor abrazo. Blas



posted by Angie Röytgolz

Castagnino en el Bellas Artes

Homenaje a Boccioni, 1965.

JUAN CARLOS CASTAGNINO: Humanismo, poesía y representación.
Muestra retrospectiva de Juan Carlos Castagnino, en el Pabellón de exposiciones temporarias del primer piso del Museo Nacional de Bellas Artes, Av. del Libertador 1473. Se puede visitar hasta el 28 de Septiembre del 2008, de martes a viernes de 12:30 a 19:30. Sábados y domingos de 9:30 a 19:30. La entrada es libre y gratuita.

El lunes 28 asistí a la presentación de la retrospectiva de Juan Carlos Castagnino, especial para prensa, ofrecida por el MNBA y la Asociación de Amigos. Profunda, completísima y muy amena la guía que personalmente nos brindó la curadora Clelia Taricco, matizada por las anécdotas que iba relatando Alvaro Castagnino, hijo del artista.

Confieso que dudé un poco antes de ir a la presentación, debo admitir que Castagnino no estaba dentro de mis artistas favoritos, hasta ese lunes, cuando descubrí mi enorme ignorancia acerca de este gran maestro y de su prolífica producción. Me sorprendieron especialmente sus pinturas, su compromiso con lo social y su poética. Mi mirada hacia Castagnino cambió, y me sentí muy bien por ello, recuperé el aprecio por otro grande de nuestro arte, y de alguna manera siento que esta muestra nos enriquece a todos. Castagnino es un gran artista argentino, indiscutible, reconocido, el Museo Nacional de Bellas Artes nos da la oportunidad de redescubrirlo y revalorizarlo.


Mini-video telefónico de la muestra retrospectiva de Juan Carlos Castagnino durante la presentación para prensa. Museo Nacional de Bellas Artes. Buenos Aires, 2008

Gacetilla de prensa.
Humanismo, poesía y representación, tres conceptos que condensan en toda su magnitud la fértil producción de J. C. Castagnino en sus 40 años de trayectoria artística. La pintura –ya sea al óleo, acuarela o acrílico-, el dibujo –tintas y carbonillas-, el mural e incluso el collage fueron los medios sobre los que fue moldeando no sólo sus ideas estéticas sino sobre todo una visión y preocupación por el hombre de su tiempo, convencido de que “el arte es fundamentalmente una imagen del hombre total”.


Serie Cordobazo. 1969.

Este profundo sentimiento humanista que Castagnino desarrolla tempranamente en los años de juventud se irá consolidando a lo largo de su vida y será tanto la clave que atraviesa toda la producción plástica, como la bandera que guiará sus actos.
La producción de Castagnino se sustenta en la certeza de que la pintura “debe ser el testimonio de nuestro mundo, de nuestras ideas, del fenómeno social que vivimos”. Contrario a todo esteticismo, Castagnino considera que la pintura es un compromiso con sus semejantes que no puede dejar de eludir.


Dock Sud, 1959

El hombre es quizá el eje indiscutible de su poética y es decididamente el leit motiv que subyace en toda la producción, desde la serie de los paisajes de campo de la década del 40 –sintéticas y, al mismo tiempo, expresivas acuarelas y pasteles- hasta las series de Vietnam y el Cordobazo de fines de la década del 60.
Un punto de crucial importancia es el lugar que otorga al espectador: “la obra es sólo potencialmente una obra de arte hasta que encuentra su espectador”, afirma. Castagnino le habla al hombre común, de allí la necesidad de utilizar recursos plásticos que fueran accesibles ya que “para el público en general, observador amante del arte en sentido potencial, no existen formas concretas ni formas abstractas, sólo existe una comunicación entre el que ve y lo que es visto, esfuerzo de comprensión, de relación… Ver es comprender, juzgar, transformar, imaginar, y leer una obra, comprender su lenguaje, es un hecho social”.


Tumulto, 1966.

El recorrido propuesto para esta muestra –pensado por grupos temáticos aunque también cronológico- comprende por un lado un contrapunto entre el campo y la ciudad, entre el paisaje rural y el paisaje urbano –sobre todo fabril-, que implica también a sus actores y protagonistas. Por el otro, distintas series –desde las que dan cuenta de hechos de violencia contemporáneos como el Cordobazo y Vietnam- hasta los niños, las figuras femeninas y masculinas, la serie de bailarinas, o la serie de dibujos en los que se evidencia su interés por la ciencia- en las que el artista se permite indagar distintos aspectos de la realidad. La selección nos permite, además, identificar la constante reelaboración de lenguaje y confirmar su afirmación de que “no es solo un cambio de tema sino un enfoque ante cada contenido, ante cada serie, un problema de expresión, de lenguaje y nueva relación entre el planteo pictórico-plástico y la significación”.

CleliaTaricco, curadora.

*las citas provienen de notas de Juan Carlos Castagnino, sin publicar. Archivo J.C. Castagnino.



posted by Angie Röytgolz.

Quién se pudo haber robado los 15 Berni???

Antonio Berni.

Se llevaron 15 obras de Berni en un robo sin precedente.
Asaltaron en Vicente López el camión que las transportaba.
La Nación. Por Gabriel Di Nicola.


La metamorfosis del pájaro azul 1932. Oleo sobre tela 90,5 x 71 cm.

Muy pocas personas tenían conocimiento de que 17 obras de arte de Antonio Berni iban a ser trasladadas del depósito de Carapachay, en Vicente López, a la casa del hijo del artista, en la Capital. Era información confidencial. Pero el dato se filtró y el camión que trasladaba los cuadros fue asaltado por al menos dos delincuentes armados, que, simulando ser policías a cargo de un operativo preventivo, se apoderaron de 15 de las piezas transportadas, de significativo valor cultural y económico.


1932. 53 x 72 cm. Óleo sobre tela.

El hecho tuvo características espectaculares y sin precedente en el país, tanto por la audacia de los ladrones como por la cantidad y la importancia de las obras robadas. Ocurrió ayer, a las 7.45, cuando el camión Mercedes-Benz 720 de Delmiro Méndez e Hijo SA, especialmente equipado para el traslado de obras de arte, fue interceptado en Mariano Moreno y Echeverría, a unos 200 metros del depósito, por dos hombres que, armados y vestidos con prendas similares a las utilizadas por la Policía Federal, descendieron de un Volkswagen Gol gris plata, según informaron fuentes del Ministerio de Seguridad bonaerense.


1962. Pigmento al agua, metal, papel y materiales varios sobre madera. 180 x 152 cm.

Las obras robadas son:
La metamorfosis del pájaro azul (1930, óleo sobre tela); La muerte acecha en cada esquina (1932, óleo sobre tela); Barrancas (1934, óleo sobre madera); La mayoría silenciosa (1972, polimatérico sobre madera); Aeropuerto (1976, acrílico sobre tela); Promesa de castidad (1976, acrílico sobre tela); La olla azul (1959, óleo sobre hardboard); Los rehenes (1969, óleo sobre tela); La zapalera (1961, óleo sobre tela); La leñerita (1954, óleo sobre tela); La casa roja con techo azul (1954, óleo sobre tela); Cristo en el garage (1981, óleo sobre tela); Juanito y los cosmonautas (1962, díptico polimatérico sobre madera); El carnaval de Juanito Laguna (1960, óleo collage sobre tela), y Ramona de fiesta (1966, construcción polimatérica).


1976. Acrílico sobre tela. 197 x 197 cm

En 2005 Adrián Gualdoni Basualdo y Sonia Decker, directores de CONSULTAR/dgb, tasaron cinco de las obras robadas ayer en 1.100.000 dólares: La metamorfosis del pájaro azul , en US$ 200.000; La muerte acecha en cada esquina , en US$ 200.000; Promesa de castidad , en US$ 200.000; Cristo en el garaje, en US$ 200.000, y El carnaval de Juanito Laguna , en US$ 300.000.


Los rehenes, 1969.

"Entiendo que son obras invendibles en el mercado local. Supongo que el tema pasará más por una negociación de rescate con la compañía de seguros", especuló Gualdoni Basualdo. Especialistas en arte calificaron el robo de inédito, porque no recordaban otro hecho en el que se sustrajeran obras de arte a mano armada.


Cristo en el garage (1981) óleo sobre tela de 200 x 135cm.

"Los delincuentes hicieron un saqueo del patrimonio cultural argentino. Es imposible que puedan comercializar las obras robadas. Creo que se equivocaron, querían robar otra cosa y se encontraron con los cuadros de mi padre. Es como si un delincuente quiere raptar a alguien de dinero y, por equivocación, secuestra a Ingrid Betancourt. Seguramente la dejaría libre en seguida. Lo mismo tendrían que hacer con las obras", afirmó a LA NACION José Antonio Berni, el hijo del artista, quien apenas se enteró del robo se comunicó con el secretario de Cultura de la Nación, José Nun, y con gente del Programa de Protección del Patrimonio Cultural, dependiente del Departamento Interpol de la Policía Federal.


“Juanito Laguna y los cosmonautas”. Antonio Berni, año 1962. Collage y óleo s/madera. 245 x 240cm.

Nun dijo que solicitó a la SIDE y a Interpol que "sellen" las fronteras para impedir que las pinturas salgan del país. Fuentes de la Aduana informaron que se emitieron dos alertas: una nacional, y otra internacional.

Pasado mañana, el hijo de Berni se iba a reunir con Guillermo Alonso, director del Museo de Bellas Artes, para conversar sobre la posibilidad de hacer una muestra.


El carnaval de Juanito Laguna, 1960, óleo collage sobre tela

Las obras de Berni se vieron envueltas en otras situaciones conflictivas tras la muerte del artista. Sus hijos y herederos, José Antonio y Lily, se repartieron la obra de su padre en partes iguales. La mujer no tuvo suerte y fue estafada por alguien de su entorno. Sólo pudo recuperar los cuadros que le correspondían cuando ganó un juicio.

En el camión de Delmiro Méndez e Hijo SA, empresa que desde principios del siglo pasado trabaja en el traslado y el depósito de obras de arte, viajaban los empleados Claudio Guassardi, Carlos Varela y Martín Sáenz... (ver nota completa: La Nación)

Relacionados:
Alguien sabía de ese traslado.
El mundo del arte, sorprendido.
Robaron 15 Berni y pagaron a sus transportistas.
Robaron 15 pinturas de Berni.
Un grupo comando robó 15 cuadros de Berni.
...